Me sumerjo en el camino hacia el trabajo y leo entusiasmada TODO UN VIAJE, un relato en primera persona que hace esa actriz que, a mi parecer, es de las mejores en cuanto a manejo de voz y dulzura mezclada con una fuerza espectacular...Silvia Abascal...
Ella, valiente y decidida, relata el viaje experimentado tras un ictus y una operación en el cerebro. Casi nada. Vives y revives por momentos lo que ella sintió y experimentó. Con qué sencillez y con qué humildad se ha enfrentado a la lucha y a la enfermedad.
Mucha gente no lo sabe, no tiene por qué saberlo...pero en mi proceso vital he tenido 2 accidentes importantes, con traumatismos craneoencefálicos incluidos (tal vez por eso se me va tanto la cabeza hacia la creatividad...o puedo parecer presa de la locura al escribir)...
el caso es que, leyendo y sintiendo este precioso libro, me siento muy identificada.
Si a mí no me hubieran atendido a tiempo, si no hubiese tenido el apoyo incondicional de quienes me quieren, si la ambulancia hubiera tardado más de la cuenta...
hoy lo contaría de otro modo.
En noviembre de 1993 (fecha en la que celebro mi segundo cumpleaños) se me truncó la carrera y el tiempo...por eso escribí un relato (el primero que escribiría) sobre lo sucedido: "Carretera de Valencia..." se tituló...y gané el primer premio del Certamen de Relato-poesía de la EU de Trabajo Social, que organizaba gente muy linda que después se convirtió en imprescindible.
De aquella experiencia extraje muchas muchas enseñanzas: una de la más preciadas...
"Aprender a ver las cosas con perspectiva, nada es blanco o negro...hay que salirse de las situaciones (como en esta foto lisboeta) para ver distintos puntos de vista".
Es lo más sano que hay en mi vida, salirse para volver a entrar.
Como en la dinámica de los nueve puntos, como en las posibilidades que un mismo problema nos ofrece y donde desarrollamos al máximo nuestra capacidad creativa....
Aprender del tiempo, de lo que nos perdemos por cada segundo sin respirar, sin expresar, sin dibujar en el aire una sonrisa...
y ese tiempo es valioso: estemos donde estemos, sol@s o acompañad@s, en la realidad o en la imaginación, en la dificultad o en la oportunidad de crecer...
Y es que la vida es tan tan maravillosa, que solo la puedes valorar cuando has pasado o tu gente querida ha atravesado una situación dura...
o cuando has desarrollado una capacidad extrema y sensible para sentir
lo valiosisima que es....
Enamorá de la vida podría ser hoy mi canción...como decía Camarón, como repitió lindamente Chambao...
AUNQUE A VECES DUELA...
Si hay oscuridad, será porque ha de brillar más la luz.
La que llevamos dentro, la que vivimos en nuestro profundo y más intimo ser,
la que sin duda alguna es el mejor regalo que podemos
brindar a las personas con las que compartimos el día al día...sea cual sea.
Y en este viaje, el máximo-principal-más importante actor/actriz...somos nosotr@ mismos...
y en nuestra maleta, que bien podrían ser estas de cartón que a mi me han acompañado y que tienen proyecto de ser algo más que un microrelato o relato breve
(en ello estoy...trabajando y creando)
hemos de llevar esa luz para desparramarla allá donde estemos...
eso sí, miren a ver si no hay riesgo de apagón, lluvia o granizo en forma de situación...
(Foto: En la azotea de un monumento en pleno corazón del Lisboa viejo. Verano 2009)
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